PROBLEMAS DE UÑAS – Uña encarnada u Onicorcriptosis

Las uñas tienen una función esencial de protección de la parte superior de los dedos frente a agentes externos o golpes. Es habitual que aparezcan problemas originados por el crecimiento

de la uña debido a su mal estado u ocasionados por otras enfermedades que tienen efectos directos en ellas.

Las uñas encarnadas son uno de los problemas más frecuentes al que nos enfrentamos en nuestra clínica. Se trata de un crecimiento irregular de la uña que se extiende por los laterales de los dedos, incrustándose en la piel. Normalmente, viene acompañado de molestias, dolor al andar y de infección.

Para ponerle solución, nuestros podólogos desinfectan la zona a tratar y retiran la espícula o parte de la uña que está ocasionando el dolor.

CALLOSIDADES Y DUREZAS – Quiropodia

Es muy frecuente encontrarse callos y durezas en las plantas de los pies o en los dedos, que representan la acumulación de células muertas en una zona concreta del pie que han provocado el endurecimiento de la dermis. Normalmente, aparecen en aquellas partes del pie que más están sometidas a presión o fricción de manera continuada con el calzado.

Las zonas endurecidas adquieren un tacto más rugoso y una apariencia amarillenta y gruesa. Si la acumulación de células muertas es demasiado grande, el callo puede volverse algo doloroso, sobre todo, en el momento de calzarse.

Por eso es imprescindible acudir a tu podólogo de confianza en el momento en el que se presenten los primeros síntomas para poder poner una solución cuanto antes y evitar molestias. En el tratamiento para eliminar los callos y las durezas, el podólogo utiliza un bisturí para retirar la piel gruesa acumulada. Además, es importante detectar cuál ha sido el origen de la formación de estas durezas para que no vuelvan a surgir.

HONGOS

Los hongos representan una infección provocada por organismos microscópicos que habitan en la planta del pie o entre los dedos y que provocan enrojecimiento y picor. Para prevenir esta enfermedad contagiosa, es necesario ser cuidadosos con la higiene de nuestros pies.

Las causas más frecuentes son el exceso del sudor o humedad y el uso de calzado con mala transpiración. Existen distintos tipos de infección por hongos según el estado avanzado en el que se encuentren, por eso, siempre recomendamos acudir al especialista ante los primeros síntomas.

PAPILOMAS

Los papilomas son pequeñas lesiones que aparecen en forma de verrugas en la planta del pie como consecuencia del virus del papiloma humano (VPH), es una patología bastante común en la población, este tipo de protuberancias se caracterizan por ser muy contagiosas y suelen confundirse en apariencia con los callos; A diferencia de los callos, las verrugas plantares son una infección vírica, no son un engrosamiento de la piel producido por el roce o la fricción.

Los lugares más comunes en los que se suele transmitir este virus son zonas públicas como piscinas, vestuarios o gimnasios mediante contacto directo con el virus VPH. Actualmente, no existe un público que sea más propenso a padecerlas, aunque suele ser más común entre niños y adolescentes.

Para tratar este tipo de lesiones, los podólogos de nuestra clínica de Madrid realizan una revisión del estado de la infección para proceder a su adecuado tratamiento según el tipo de lesión que hayan provocado las verrugas víricas.

ORTESIS DE SILICONA

Las ortesis de silicona son unos elementos terapéuticos que se colocan en el antepié, por ejemplo entre los dedos o debajo de ellos para cambiar la posición de estos o protegerlos.

La silicona es un polímero perteneciente al grupo de los elastómeros que por sus características de elasticidad, resistencia y biocompatibilidad es utilizada en muchos tratamientos podológicos.

En muchas ocasiones una deformidad en los dedos o una lesión que se repite constantemente puede evitarse con el uso de una ortesis de silicona que modifique la forma del antepié o proteja una determinada zona.

Es importante destacar que una silicona confeccionada por un podólogo es adaptada a cada paciente para su morfología concreta, las siliconas estándar muchas veces molestan o no dan ningún resultado.

Cuando la deformidad del antepié es debido a la biomecánica una plantilla es más efectiva y más recomendable. Pero a la hora de proteger una zona, separar los dedos o frenar el avance de una deformidad en ellos, la silicona es resolutiva y cómoda.